-Querido diario.
Esta mañana como de costubmre me he levantado, me he vestido, he bajado ha desayunar, me he arreglado y he ido hacia el instituto. Pero cual fue mi sorpresa? A mitad del camino me encontré con un par de amigos que hacía muchísimo tiempo que no veía. Yo tenia que estar en 10 minutos en la escuela, pero hacia tanto que no veía a Marc y Eric que opté por irme con ellos. Se que eso no estuvo nada bien diario, pero no se, tuve la necesidad de hacerlo. Confieso que Eric desde mucho tiempo atrás me gusta mucho.
Ellos dos ya dejaron la escuela, y ambos trabajan en un bar, diferente local pero al fin y al cabo trabajan de lo mismo. Estuvimos los tres recordando viejos tiempos y como siempre echándonos unas risas, como de costumbre. Las horas se pasaban tan rápido que cuando me quise dar cuenta ya era la hora del patio. Nos dimos el facebook, y los teléfonos para estar en contacto y que no pasara tanto tiempo sin vernos. Y corrí rápidamente hacia la escuela para llegar antes de que se acabara el patio. Llegué a tiempo y la verdad es que me fue todo bien, nadie se dio cuenta como para avisar a casa. Todo funcionó a la perfección, pero me sentí mal, yo nunca había echo nada así, ni tenia intención de volverlo a hacerlo. Pero si que empecé a hablar con Eric, a quedar con el y a coger más confianza con el tiempo. Pasamos unas maravillosas semanas juntos,hasta que por fin! Eric se decidió a pedirme salir! No sabía ni como reaccionar ni que decir en ese momento. Le dije que lo pensaría, y allí fallé, no tenia que pensar nada, me gustaba desde que tenía 12 años! Pero no importó lo llamé para quedar, le contesté y desde ese mismo instante fui la persona más feliz de este mundo!
La cosa iba genial entre nosotros, nada ni nadie podía estropearlo. Llevábamos ya bastante tiempo juntos, y decidimos formalizar la cosa contándoselo a nuestros padres. Nos sentimos tan bien al contarlo que decidimos celebrarlo yendo a cenar a un restaurante cerca de su casa. Parecíamos una pareja de las de verdad, de las de toda la vida y eso me hacia sentirme tan feliz. Pero como nada es para simpre empezaron las dudas. Que si vamos muy rápido, que tendríamos que dejarnos más espacio...Y es que es verdad, eramos demasiado jóvenes como para estar ya tan atados a la pareja, cosa que yo no encontraba nada malo, porque estaba genial con Eric pero el no estaba últimamente muy bien, así que acabamos dándonos un tiempo, pero seguíamos queriéndonos muchísimo. Pasaron años y ninguno volvió a saber del otro. Yo escribía cada día en mi diario sobre el, y aun conservo todos los escritos donde el salía. Hoy yo, Claudia Costa Arenas, tengo 38 años, y estoy casada con Eric Sánchez Santana, tengo un hijo, Hugo Sánchez Costa y creo en el amor para toda la vida, porque si que existe, porque hoy puedo decir que mi primer amor aun esta a mi lado!
Gracias diario por escuchar todo lo que te cuento, hasta mañana.
Atentamente: Claudia Costa Arenas 27·03·2035.
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